Ciertamente hay muchas cosas que se presentan en el camino que quieren desanimarnos de seguir adelante en el Camino del Señor, parece mas facil dejar que las circunstancias nos absorvan que hacerles frente parece que no tenemos fuerza, para el ápostol Pablo tal vez fue así tambien, también tuvo momentos donde sentía que ya las fuerzas se iban, vemos en la Palabra todas las cosas que tuvo que atravesar en su servicio al Señor, sufrió carceles, rechazo, golpes, soledad al sentir que lo habían abandonado, él también era una persona como nosotros.
Pero el ápostol Pablo aprendió algo muy importante, y vemos este principio en su vida, a pesar de que estuvo en muchas circunstancias dificiles y que lo podían desanimar, Pablo no dejó que sus emociones lo dominarán, no dejo que lo movieran de aqui para allá, sino que siguió adelante en la Palabra, en su servicio, en su llamado.. . . . "Hermanos yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago; olvidando ciertamnete lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que esta adelante, prosigo a la meta, al premio del Supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús"
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